|
«Inicio
Buenos Aires resguarda sitios llenos de sabor
Cuenta con más de 3.500 restaurantes y aunque las carnes son su plato fuerte, también se pueden degustar muy buenas pastas, mucha pizza y empanadas de carne Por la fuerte impronta que le dejó su pasado de inmigrantes, Buenos Aires es el lugar ideal para probar toda clase de comidas. La ciudad cuenta con más de 3.500 restaurantes y aunque las carnes son su plato fuerte, también se pueden degustar muy buenas pastas, mucha pizza y empanadas de carne. Hay varios distritos gastronómicos -Puerto Madero, Palermo, Las Cañitas- donde se concentran gran cantidad de locales en pocas cuadras y algunos barrios son la típica opción para probar una comida en especial.
LA ETERNA TENTACIÓN DE LA CARNE
Sin dudas, el asado -carnes blancas y rojas cocidas en una parrilla- es el plato nacional. Para los argentinos implica una reunión social, todo un rito. La parrillada incluye achuras que acompañan a las carnes: éstas son menudencias de la vaca, como riñones, mollejas, tripas, morcilla, chorizo y chinchulines. También pueden acompañar al asado ensaladas, papas a la parrilla o la grandiosa provoleta -queso provolone asado a la parrilla.
Hay una creencia generalizada que afirma que "en cualquier parrilla de se come muy bien". Según esta opinión, en el primer lugar que uno se encuentre al paso habrá buena carne hecha en el momento y un asador atento y riguroso. Lamentamos desilusionarlo, no es así. Pero si su meta es un jugoso trozo de carne, tome nota:
Estilo Campo (Alicia Moreau de Justo 1840-Tel. 4312-4546): situado en uno de los polos gastronómicos más elegantes de la ciudad, Puerto Madero, es una opción para comer muy buena carne al asador -con fuego de leña-, el sabor más tradicional del campo argentino. No es de los lugares más baratos, pero sí la calidad es muy buena, y cuenta con una de las mejores vistas de los diques de Puerto Madero.
Viejo Gómez (Estados Unidos 374- Tel. 4300-2132 ): si anda por San Telmo, y comenzó a sentir hambre, no deje de pasar por esta antigua casa reciclada. La especialidad es la parrillada de bifes: bife de lomo, bife de chorizo, colita de cuadril, papas fritas y ensalada de rúcula, cuyo uso es testimonio de la herencia culinaria italiana.
Don Julio (Guatemala 4691-Tel. 4831-9564 / 4832-6058): en uno de los distritos gastronómicos por excelencia, Palermo. Conviene ir tranquilo, con tiempo. Incluso, pedirse un vermouth -otra de las típicas costumbres argentinas- y acercarse a mirar los fuegos. El lugar tiene clima bullanguero y familiar, sin que esto atente contra un servicio atento y profesional. Y cuando llega el calor, las mesas en la vereda son un paraíso. Como especialidades de la casa, el chorizo Don Julio (con muzarella y tomates secos re-hidratados), riñones Don Julio (con ajos macerados en Malbec y perejil), y asado de tira, vacío, bife de chorizo y entraña.
PASIÓN POR LAS EMPANADAS
Es verdad: la empanada no es un invento argentino. Pero, a pesar de esto, nos atrevemos a decir que -hoy por hoy- no existe ninguna otra cultura en el planeta que sienta tanta pasión como los argentinos por la empanada. Aquí, no sólo cada familia tiene una receta propia, sino que incluso las diversas regiones del país se identifican con un modo de elaborarla. Aquí van dos direcciones imperdibles.
La Americana (Av. Callao 83 -Tel: 4371-0202): este lugar nació en 1935 y es de los más tradicionales en la ciudad. Las empanadas de queso y cebolla y la salteña jugosa con algo de picante, las dos mejores. El ambiente es bullicioso, ciento por ciento porteño: en el estilo de mesas, en los uniformes de los camareros, en el modo de atender campechano y acelerado.
El Sanjuanino (Posadas 1515 -Tel.: 4804-2909): la casa es muy conocida y tiene otras sucursales. Este local está ahí nomás de lugares como el Alvear Palace Hotel y de la avenida más elegante de Buenos Aires. Todas las variedades están muy bien, y más aún si al morderlas se les agrega algo de salsa picante. Sin dudas, recomendada la Gran Sanjuanina.
LA RUTA DE LAS PASTA
Sangre italiana corre por las venas de muchos argentinos, y seguramente por eso existen tantos restaurantes que se inclinan por las tradiciones culinarias de la península. A continuación les proponemos los mejores lugares para disfrutar de una vera pasta italiana.
Il Matterello (Martín Rodríguez 517- Tel: 4307-0529): en el barrio de La Boca, un clásico. En este restaurante, cuyo nombre significa palo de amasar, sus dueñas, descendientes de italianos de Modena, no compran nada de pasta seca en paquete. Todas son frescas. Además de las infaltables carbonara o putanesca se destaca el ragout y la bolognese de carne de vaca y cerdo cortada a cuchillo.
Janio (Malabia 1805 - Tel: 4833-6540/1): con mesas en la vereda, y una terraza que llama a disfrutar de la vista de la plaza Armenia, es uno de los más concurridos de Palermo Soho, y en el invierno, el salón invita con una cálida chimenea. Las pastas son sólo uno de los atractivos del menú, de lo más interesante los ravioles de calabaza, amaretto y almendras.
PROFUSIÓN DE PIZZAS
Hay en Buenos Aires más de 3.000 pizzerías, con sabores que van desde lo más simple-de mozzarela, con queso que chorrea- hasta las más sofisticadas con queso brie con rúcula y salmón.
El clásico de clásicos en este rubro es El Cuartito (Talcahuano 937), que ofrece una pizza con masa más bien gruesa -conocida como "de molde"- en un pequeño local decorado con fotos tangueras y futboleras. Y a pocas cuadras de allí, sobre la avenida Corrientes, otras dos pizzerías con mucha tradición... Guerrín (Corrientes 1368) con una mesada para comer solo y al paso, además de amplios salones con mesas largas como para ir acompañado con amigos a comer pizza clásica (jamón y morrones, por ejemplo). Y del Obelisco hacia el sur, Las Cuartetas (Corrientes 838), donde se impone la "muzza", como se conoce popularmente a la pizza de mozzarela.
LO ÚLTIMO
Y -last but not least-, uno de los lugares más de moda de la ciudad... La vinería de Gualterio Bolívar -Bolívar 865 - 4361-4709- ofrece en San Telmo la posibilidad de conocer la "cocina molecular", de la mano de Alejandro Digilio, un discípulo de Ferrán Adrià (el de El Bulli, considerado el mejor restaurante del mundo los últimos 4 años). En sus menús de degustación mezcla sabores y texturas de manera diferente y original. Ideal para quienes quieran probar sabores nuevos, maridados con vinos locales por copa, producto de la excelente selección del sommelier de la casa, Nicolás.
(El Universal)
«Inicio |
         
|