Finca Villacreces presenta su nuevo proyecto de Pruno, un vino fresco y desenfadado
Con 12 meses de permanencia en barrica, está elaborado con la uva de los viñedos de menos de 20 años de la propia finca
EL NUEVO VINO DE FINCA VILLACRECES MANTIENE LA ESENCIA DEL PAGO EN EL QUE UBICA Y BASCA ABRIRSE A NUEVOS PALADARES
Villacreces, ubicada en pleno corazón de la “milla de oro” de Ribera del Duero, lanza al mercado su nuevo y esperado proyecto: Pruno. Pruno es el cerezo de flor o cerezo japonés. Este árbol tiene gran significación en la filosofía oriental pues se le vincula a la totalidad del universo, al recoger, desde sus raíces hasta sus hojas, un sistema completo de vivencias e individuos. Estas experiencias son las que comprende Pruno, ya que condensa, tras una meditada elaboración, la peculiaridad de los viñedos de menos de 20 años de Finca Villacreces.
Al igual que la flor del mismo nombre, Pruno desprende juventud, gracias a una crianza de 12 meses en barricas de roble francés de grano fino. Estas barricas han sido seleccionadas en las prestigiosas tonelerías Darnajou y Taransaud. La uva de Pruno, que es la más temprana en ser vendimiada, se recoge en caja de 15 kilogramos para pasar por una doble selección manual en mesa, y se reparte entre las variedades Tinto Fino (90 %) y Cabernet Sauvignon (10%).
Este innovador proyecto configura un vino marcado por la frescura y desenfado, abriendo las puertas de Finca Villacreces a nuevos paladares y consumidores. Pruno se muestra con un color cereza picota intenso. Aroma a frutas rojas con un acompañamiento de roble que hace prever su entrada golosa y dulce. Recuerda a fruta madura y regaliz con toques torrefactos y toffes, gracias a la barrica francesa. Agradable paso por boca y suave recuerdo.
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